La orden tiene la intención de desmantelar el programa DEI e implica la amenaza de retener fondos federales para escuelas no conformes.
SEATTLE – Una nueva orden ejecutiva firmada por la administración Trump ha planteado varias preocupaciones en la comunidad educativa, y los líderes locales de Washington expresan su preocupación sobre el impacto potencial en las escuelas. La directiva se dirige a los programas de diversidad, equidad e inclusión (DEI). Esto puede resultar en muchos temores de perder fondos si la escuela no cumple con las nuevas pautas.
La orden posterior al fallo de la Corte Suprema de 2023 sobre el caso afirmativo tiene como objetivo desmantelar el programa DEI, junto con la amenaza de retener fondos federales para escuelas no conformes. El superintendente de liderazgo público de Washington, Chris Lakedal, se opone a la orden y lo llama un intento de chantajear a la escuela y amenazar los esfuerzos de Dei, en lugar de inaplicable.
“El día no es algo malo, eso es bueno”, dijo Lakedal. “No tienen el poder de hacer eso, dicen que están tratando de amenazarnos, pero no lo amenazaremos”.
Liz Huser, directora ejecutiva de la Coalición de Educación del Sureste de Seattle, señaló que el orden combina dos conceptos: Acción Positiva y Dei.
“El día de hoy no es una acción positiva, y ha sido muy confundida durante toda la orden ejecutiva”, dijo.
Para complicar aún más el problema, las órdenes ejecutivas pueden tener graves consecuencias económicas. En Washington, aproximadamente el 7% del presupuesto educativo del estado proviene de fondos federales. Este recorte de fondos podría tener graves impactos en los programas que ayudan a apoyar a los estudiantes vulnerables.
“En realidad, eso significa mucho. Estos son programas como almuerzos de corte gratuito, fondos adicionales para la escuela del título I y la creación de personal de apoyo para los estudiantes que ya están luchando”, dijo Huizar.
Si la escuela cumple con la orden y elige desconectar el programa DEI, Huizar teme a los estudiantes vulnerables serán los más atacados.
“La batalla en nuestras vidas es siempre todos los días, pero la presión que enfrentamos es incluso más que nunca”, dijo. “Pero esta es una oportunidad para que nos unamos y digamos que no podemos permitir que el sistema regrese”.
A pesar de las preocupaciones, muchos distritos escolares y universidades en Washington han indicado que no harán cambios en sus programas DEI en respuesta a la orden. Se espera que la orientación legal sobre el tema se publique, pero su línea de tiempo sigue siendo desconocida. Se espera que la escuela cumpla con la orden ejecutiva para el próximo viernes, pero la incertidumbre sigue siendo cómo entrará en vigencia.