Un pasajero de 31 años de un vuelo nacional de Volaris intentó secuestrar el avión y desviarlo hacia Estados Unidos.
El Airbus A320 se dirigía desde León, estado de Guanajuato a Tijuana cuando se vio obligado a realizar un aterrizaje de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Guadalajara apenas 45 minutos después del despegue.
Las autoridades informaron que un pasajero llamado Mario agredió a una azafata e intentó irrumpir en la cabina, y afirmó que su familia fue amenazada, reseñó AFP.
Según la Secretaría de Seguridad y Protección Civil (SSPC), el hombre afirmó que un familiar cercano había sido secuestrado y que había recibido amenazas de muerte advirtiéndole que no viajara a Tijuana al salir de León.
Los equipos actuaron rápidamente para detener al sospechoso, que viajaba con su esposa y sus dos hijos. Siguiendo el procedimiento, el piloto emitió un código de advertencia, se desvió a Guadalajara y el avión aterrizó sano y salvo. El sospechoso fue entregado a las autoridades locales.
El punto de partida del avión, Guanajuato, es una de las regiones de México más afectadas por la violencia de los cárteles de la droga, y delitos como la extorsión y el secuestro están muy extendidos.
“Volaris lamenta cualquier inconveniente causado por esta situación. La seguridad de nuestros pasajeros y tripulación es nuestra principal prioridad”, dijo la aerolínea en un comunicado. Todos los pasajeros, tripulación y avión resultaron ilesos.
Luego del arresto, el vuelo reanudó su vuelo rumbo a Tijuana.