Deshacerlo es el último libro escrito por el respetado médico y científico Dr. Dean Ornish. Este libro sostiene que nuestra salud no está determinada por los genes con los que nacemos, sino más bien por si estos genes están activados o desactivados. Y ese proceso está determinado en gran medida por nuestro estilo de vida.
Nuestro microbioma, especialmente el microbioma intestinal, desempeña un papel importante en nuestra salud y debe considerarse un sistema de órganos separado, similar al cerebro, los riñones, el hígado, etc. El Dr. Ornish realizó una investigación con destacados científicos del microbioma “para comprender cómo los cuatro componentes de un programa de medicina del estilo de vida: comer mejor, moverse más, estresarse menos y amar más interactúan con nuestro microbioma de manera curativa”.
Más de 100 billones de microorganismos (bacterias, virus y hongos) viven en la boca, la nariz y los intestinos humanos. Y en nuestra piel (incluido nuestro microbioma vaginal). La cantidad de genes en todos los organismos de nuestro microbioma supera la cantidad de genes en todas nuestras propias células en al menos 100 a 1. Dependiendo de nuestro estilo de vida, nuestro microbioma puede mantenernos sanos o causar enfermedades. A continuación se muestran algunos ejemplos:
Obesidad: una dieta rica en grasas, azúcar o carbohidratos refinados puede promover el crecimiento de bacterias que causan el almacenamiento de grasa y el aumento de peso. Inflamación: Una dieta centrada en productos animales aumenta la cantidad de microorganismos que causan inflamación crónica, lo que contribuye a enfermedades cardiovasculares (ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares), diabetes y cáncer. Depresión: las bacterias intestinales producen neurotransmisores como la serotonina y la norepinefrina, que “ayudan a prevenir la ansiedad, la depresión y la fatiga”. Demencia: existe evidencia de que la inflamación desempeña un papel en la enfermedad de Alzheimer. Según el Dr. Ornish, las personas con enfermedad de Alzheimer tienen menos bacterias intestinales que tienen propiedades antiinflamatorias y más bacterias que causan inflamación. Conexión boca-cuerpo: un microbioma bucal saludable ayuda a prevenir la acumulación de placa, las caries y la enfermedad periodontal. Todos estos provocan inflamación crónica, que puede provocar muchas enfermedades, incluidos ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Cáncer: la prevalencia de ciertos tipos de bacterias intestinales aumenta el riesgo de cáncer de colon.
El Dr. Ornish recomienda los siguientes pasos para desarrollar un microbioma que promueva la salud:
Coma bien: las bacterias de nuestro microbioma intestinal se alimentan de fibra que se encuentra únicamente en las plantas. Los alimentos de origen animal promueven las bacterias intestinales que causan enfermedades. Las frutas, verduras, legumbres (frijoles, lentejas), cereales integrales, nueces y semillas estimulan el crecimiento de microbios intestinales que promueven la salud. Muévase más: las investigaciones muestran que el ejercicio aumenta los microorganismos que producen ácidos grasos de cadena corta, lo que reduce la inflamación que causa enfermedades. Estrésate menos, ama más. El Dr. Ornish demostró que evitar emociones negativas como el estrés y la soledad (incluso las mascotas pueden ayudar) reduce la cantidad de bacterias intestinales productoras de interleucina. Las interleucinas causan inflamación, activación dañina del sistema inmunológico y depresión. Evite el uso de antibióticos a menos que sea absolutamente necesario. Una semana de antibióticos “puede alterar el microbioma intestinal durante hasta un año”. Para mantener un microbioma bucal saludable, evite los enjuagues bucales y las pastas dentales con propiedades antibacterianas.
En resumen, para tener una salud óptima, sea amable con los billones de microorganismos que componen su microbioma. Pueden ser tus amigos o tus enemigos.


