Cuando nos sentimos mal por nuestras vidas, generalmente se debe a que una o dos cosas no funcionaron. Podemos centrarnos en estas cosas y absorbidos por el hecho de que no podemos ver lo bueno que nos rodea.
De hecho, los momentos de gratitud pueden marcar la diferencia entre los días buenos y malos. Prueba esto.
1. Recuerde la puesta de sol de anoche y planee verlo de nuevo esta noche. Tal belleza te ayudará a equilibrar un poco. Al principio, solo puede evaluarlo mentalmente, pero se hundirá en su mente. Ahí es donde lo necesitas.
2. Dile a alguien que les estás agradecido. “La cena fue genial” o “Gracias por estar allí” son palabras que te volverán. Gracias no es una calle de sentido único. Si no es suficiente, mira cuánto estás dando.
3. Haz algo bueno para las personas que no conoces, como tener espacios de estacionamiento en el centro comercial. Esto te hace sentir un poco mejor contigo mismo y tu vida, ya que has mejorado el día de otra persona.
4. Si estás enojado por la vida, mira adentro. Compruebe usted mismo para ver si se presiona alguno de los botones. Hay razones por las que estás molesto, pero eso puede no ser lo que piensas.
5. Encuentra algo nuevo. Un gran ejercicio es dar un paseo y encontrar 20 cosas nuevas que nunca antes haya visto. Una vez que llegues a los 20, te sentirás aliviado de tu malestar. Puede que las cosas no hayan cambiado, pero tienes tiempo para escapar de él, por lo que puedes pensar más claramente.
6. Voluntarios en su comunidad. No hay nada que pueda apreciar en mi vida más que ayudar a los menos afortunados. Puede tener riqueza, pero si no puede estar agradecido por la vida, ¿cuál es su valor? Cuando le ayudas, el calor que recibes a cambio llenará tu corazón.
7. Recuerda lo que has logrado. Incluso si no te sientes tan bien con las cosas en este momento, ten en cuenta que has recorrido un largo camino. Has superado algo de oscuridad antes, y volverás a hacerlo.
8. Confía en ti mismo. Si sabe que es una buena persona, escuche sus propios pensamientos y su corazón, independientemente de lo que alguien dijo. Eleanor Roosevelt dijo una vez: “No podemos hacerte inferior sin tu consentimiento”.
9. Si no hay gente alrededor, sal con su mascota. Si no lo tiene, vaya a un centro de refugio o de adopción y acóicite a una de estas criaturas sin hogar, ya que el amor regresará. Conozco a algunas personas que hacen esto como una forma de tratamiento, y sus vidas son buenas para ello.
10. Confía en tu voz interior. Pregúntese si ha hecho un buen trabajo en su vida hasta ahora. No te mientes a ti mismo. Además, una vez que vea algunas áreas donde puede usar el ajuste, consíguelo. Tu corazón y tu mente saben dónde estás emocionalmente. Escuche lo que tienen que decir.
Evaluar tu vida no debería ser un trabajo. Danos una violación y promete que no volverás a descender ese camino. Si haces lo que sabes, es fácil.
Burton Goldsmith es un psicoterapeuta y humanitario galardonado con doctorado. También es columnista, autor de ocho libros y blogger en PsychologyToday.com con más de 34 millones de lectores. Póngase en contacto con él en barton@bargoldsmith.com.