Un estudio reciente del Instituto Allen de Seattle, dirigido por el científico Hongkui Zeng, ofrece información prometedora sobre cómo las elecciones diarias pueden ayudar a mantener la salud del cerebro a medida que envejecemos. La investigación de Zeng, publicada en la revista Nature, examina los cambios celulares en el cerebro relacionados con la edad y proporciona consejos prácticos sobre cómo reducir estos efectos mediante simples ajustes en el estilo de vida.
“El envejecimiento es un proceso natural en el que la homeostasis del cuerpo y el cerebro se deteriora gradualmente”, explicó Zeng en el programa “Seattle’s Morning News” de KIRO News Radio.
Su equipo realizó experimentos en ratones, comparando los cerebros de adultos jóvenes y ratones mayores para identificar regiones específicas y tipos de células que son más susceptibles a los efectos del envejecimiento.
“Hemos identificado un conjunto de tipos de células especiales que sufren cambios genéticos significativos durante el proceso de envejecimiento”, dijo.
El papel de la inflamación en el envejecimiento cerebral
Uno de los hallazgos clave de la investigación de Zeng es que la inflamación en el cerebro aumenta significativamente con la edad.
“El hallazgo principal fue un aumento en la inflamación, que se refleja en la activación de genes que causan inflamación en ciertos tipos de células”, dijo Zeng.
Esta inflamación afecta principalmente a las células gliales, como la microglía, que son esenciales para mantener la salud del cerebro. Además, también se encontró que estaba involucrado el hipotálamo, un área que controla el metabolismo.
“Las células que regulan el metabolismo también están experimentando cambios inflamatorios”, añadió.
Nutrición y metabolismo: una relación importante
Zeng dijo que esta conexión entre el metabolismo y la salud del cerebro resalta la importancia de una nutrición adecuada.
“El metabolismo del cuerpo involucra factores como la nutrición, la ingesta de alimentos, los niveles de azúcar en la sangre y los niveles de colesterol. Muchos de estos están controlados por centros específicos en el cerebro. Cuando estos centros funcionan mal, “Y el metabolismo de todo el cuerpo también funcionará mal”, dijo Zeng. explicado.
Esta información destaca cómo mantener un metabolismo saludable a través de la dieta impacta directamente en la salud del cerebro.
Consejos dietéticos prácticos para mantener tu cerebro sano
Según sus hallazgos, Zeng ofrece algunas orientaciones sobre opciones dietéticas que pueden ayudar a mantener la función cognitiva.
“Una dieta saludable incluye consumir verduras de hojas verdes y evitar alimentos ricos en grasas y fritos que promueven la inflamación. Un tipo de dieta antiinflamatoria es muy importante”, aconseja.
Incorporar estos alimentos a tu dieta diaria puede marcar una gran diferencia con el tiempo. La coherencia es clave.
“Sí, el envejecimiento es un efecto a largo plazo y requiere hábitos. Incluso los pequeños hábitos diarios pueden tener un efecto acumulativo a largo plazo”, enfatizó Zeng.
Esto significa que los cambios graduales y sostenidos en su dieta pueden retardar el deterioro cognitivo relacionado con la edad.
Rompiendo el ciclo: envejecimiento y demencia
Este estudio también arroja luz sobre la relación entre el envejecimiento y la demencia.
“Investigaciones recientes han demostrado que hay mucha inflamación en el cerebro de las personas con demencia”, explicó el Dr. Zeng. “Es como un círculo vicioso entre la disfunción de las células cerebrales, la degeneración y el aumento de la inflamación”.
Al abordar la disfunción celular y la inflamación, puede retardar la progresión de la demencia y enfermedades relacionadas.
Salud metabólica y función cognitiva.
Al discutir la analogía común de la enfermedad de Alzheimer y la demencia como “diabetes tipo 3”, Zeng ofreció una perspectiva equilibrada.
“La diabetes tipo 3 es una analogía interesante, pero no es lo que sucede en la vida real. No sabemos si los niveles elevados de azúcar en la sangre están directamente relacionados con la demencia o la enfermedad de Alzheimer. “Si lo piensas bien, es una analogía bastante buena. ” ella dijo.
Esto pone de relieve la compleja relación entre la salud metabólica y la función cerebral.
Nunca es demasiado tarde para hacer un cambio
Para aquellos que están preocupados por sus hábitos alimentarios pasados, Zeng tiene algunos consejos tranquilizadores.
“Pase lo que pase, el envejecimiento es un proceso gradual, por lo que nunca es demasiado tarde para cambiar a una dieta más saludable y mantener un estilo de vida más saludable. Siempre se puede reducir el ritmo”, afirmó.
Zeng anima a las personas a tomar medidas activas para mejorar la salud de su cerebro, sin importar su edad.
Consejos prácticos para la vida cotidiana
Para ayudar a los lectores a poner en práctica estos descubrimientos, Zeng recomienda incorporar ensaladas de hojas verdes a su dieta diaria.
“Mi comida favorita es la ensalada verde”, dijo.
Ella aconseja elegir verduras ricas en nutrientes y dice: “Elija verduras de hojas verdes realmente deliciosas en el supermercado. Son las más nutritivas para nosotros”.
Este estudio destaca que simples cambios en el estilo de vida, especialmente en la dieta, pueden tener un gran impacto en la salud del cerebro a medida que envejecemos. Llevar una dieta antiinflamatoria y mantener la salud metabólica puede ayudar a frenar el deterioro cognitivo relacionado con la edad.
Charlie Hager es el presentador del programa “Seattle’s Morning News” de KIRO Newsradio. Puedes leer más sobre la historia y el comentario de Charlie aquí. Siga a Charlie en X y envíele un correo electrónico aquí.
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