La educación SHADOW se refiere al aprendizaje informal. Su objetivo es complementar el aprendizaje formal. Esta es una tendencia global que está creciendo a medida que más candidatos toman exámenes competitivos internacionales, regionales y locales para obtener acceso a instituciones educativas de élite y buenos empleos.
La COVID-19 ha añadido nuevas dimensiones a la educación en la sombra en forma de lecciones virtuales y tutorías, y la integración de la tecnología ha hecho que la educación en la sombra esté más basada en las necesidades, a su propio ritmo y personalizada. Esto dio lugar a un modelo de aprendizaje. La educación paralela ofrece una carrera profesional alternativa y una fuente adicional de ingresos para los jóvenes educados, y también es una fuente potencial de ingresos para las instituciones educativas.
Aunque este tipo de aprendizaje informal ha sido aceptado, hay poca discusión sobre su efectividad y sus deficiencias. Tradicionalmente, la educación paralela se ha utilizado indistintamente con “matrícula”, que implica costos adicionales fuera del horario escolar y se administra en un entorno privado. La educación paralela consiste en una variedad de eventos de aprendizaje, como campamentos de verano, clases nocturnas adicionales y preparación para exámenes competitivos y exámenes de ingreso a instituciones educativas. Se hace hincapié en abordar las deficiencias de los alumnos en materias específicas, todo lo cual conlleva costos adicionales.
Debido al costo financiero, está disponible para los ricos, pero muchos otros no pueden permitírselo. La educación paralela brinda a los descendientes de familias adineradas más educación y oportunidades de empleo. El acceso a la educación paralela basado en la riqueza resalta la disparidad entre estudiantes “favorecidos” y “desfavorecidos”.
La educación eficaz tiene lugar dentro de un entorno socioecológico más diverso.
El mayor costo social es que a medida que la educación se vuelve más mercantilizada, el entorno educativo se vuelve más vulnerable a crecientes desigualdades en el aprendizaje. El camino hacia la educación paralela también refleja la posibilidad de que las escuelas no estén respondiendo a los deseos de los padres con respecto a la educación de sus hijos. Además, los docentes en entornos de educación paralela son más sensibles a las necesidades de los alumnos que las escuelas, y los estudiantes crecen más que los docentes que estudian únicamente en las escuelas. Por lo tanto, aunque la educación paralela sólo profundiza la brecha entre ella misma y la educación formal, implica cierto grado de confianza de los padres.
Hay otro aspecto que vale la pena señalar. Significa que los niños pagan el precio de tener que experimentar entornos educativos tanto formales como paralelos. Estar expuestos a entornos controlados, ya sean formales o informales, puede tener un impacto negativo en su potencial intelectual y social. En Pakistán, en ambos espacios, se encuentran parte de un lienzo de aprendizaje reducido lleno de contenidos homogéneos y una pedagogía que resta valor al aprendizaje real y prepara sólo para pruebas y exámenes. Hay una alta posibilidad de que se dé cuenta de eso.
El aprendizaje efectivo tiene lugar dentro de una ecología social más amplia y diversa y está impulsado por la curiosidad genuina del alumno y el enfoque comprometido de la enseñanza por parte del instructor. En entornos de educación paralela, los estudiantes pueden experimentar síntomas de agotamiento después de un día ajetreado en la escuela y comenzar a ver el aprendizaje como una carga en lugar de un ejercicio de curiosidad y exploración. Pueden parecer ratones de biblioteca, pero no pueden aplicar el conocimiento que adquieren a problemas de la vida real.
A pesar de los beneficios de la educación paralela, debemos preguntarnos si los niños realmente necesitan tiempo adicional de aprendizaje si ya pasan una parte importante de su día en la escuela. ¿Y esto contribuye a su aprendizaje o es simplemente una carga adicional? ¿Cómo afecta su vida social y sus interacciones con la familia, los amigos y la sociedad?
Quizás sea hora de monitorear los costos ocultos de la educación, no sólo financieros, para evitar la sobremercantilización de la educación y la explotación de las familias.
Los gobiernos podrían utilizar la educación paralela en un esfuerzo por abordar el problema de los niños no escolarizados ofreciendo programas de tutoría gratuitos o de bajo costo a este segmento de familias de bajos ingresos. Esto ayuda a promover el acceso equitativo a las oportunidades educativas. Precisamente para este fin se puede contratar a jóvenes elegibles y cualificados procedentes de zonas remotas.
Pero la solución duradera reside en abordar las deficiencias del sector de la educación formal, que es la única manera de restaurar la confianza del público en las escuelas públicas. Aunque se necesitan de manera crítica medidas como mejorar el plan de estudios, la pedagogía y los procesos de evaluación/valoración;
El principal desafío es revisar nuestro enfoque como sociedad respecto del propósito de la educación, centrándonos menos en los resultados de las pruebas y más en producir capital humano informado, responsable y confiable.
El autor es educador.
Publicado en Dawn el 30 de diciembre de 2024